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La llama consume el aire y es alimentada por la leña. El aire es la única condición para el crecimiento de los árboles. La leña, cooperando a consumir el aire, mediante el fuego, lucha contra sí misma y contra su propia fuente; y, sin embargo, el oxígeno del aire subsiste y los árboles no cesan de reverdecer.
Georg Wilhelm Friedrich Hegel
En el cristianismo es doctrina capital que la Providencia ha regido y rige el mundo; que cuanto sucede en el mundo está determinado por el gobierno divino y es conforme éste.
China tiene de peculiar el haberse desarrollado dentro de sí misma.
La historia universal es el progreso de la conciencia de la libertad.
Los mismos afanes y esfuerzos se producen en una pequeña ciudad que en el gran teatro del mundo.
La historia no es el lugar de la felicidad. Los periodos de felicidad son páginas blancas.
Hay que refugiarse en la filosofía si se quiere conocer a Dios.
La belleza se define como la manifestación sensible de la idea.
Aquel para quien el pensamiento no sea lo único verdadero, lo supremo, no puede juzgar en absoluto el modo filosófico.
El pueblo es aquella parte del Estado que no sabe lo que quiere.
Con la existencia surge la particularidad.
Pero el hombre no es independiente, porque el movimiento comience en él, sino porque puede inhibir el movimiento. Rompe, pues, su propia espontaneidad y naturalidad.
Lo que la experiencia y la historia enseñan es que los pueblos y los gobiernos jamás han aprendido algo de la historia ni han actuado según las lecciones que hubieran tenido que sacarse de ella.
La filosofía de la historia no es otra cosa que la consideración pensante de la historia; y nosotros no podemos dejar de pensar, en ningún momento. El hombre es un ser pensante; en esto se distingue del animal.
Nada es; todo deviene.
Pues en la razón está lo divino.
Lo que es razonable es una realidad, y lo que es una realidad es razonable.
La historia es el esfuerzo del espíritu para conseguir la libertad.
Las verdaderas tragedias no resultan del enfrentamiento entre un derecho y una injusticia. Surgen del choque entre dos derechos.
Entre otras cosas, no debemos dejarnos seducir por los historiadores de oficio.
China y la India se hallan todavía, por decirlo así, fuera de la historia universal; son la suposición de los momentos cuya conjunción determina el progreso viviente de la historia universal.
Ser independiente de la opinión pública es la primera condición formal para lograr algo grande.
El filósofo, debe hacer filosofía cuando ya la vida ha pasado.
Pero la filosofía nos enseña que todas las propiedades del espíritu existen sólo mediante la libertad, que todas son simples medios para la libertad, que todas buscan y producen la libertad.
El hombre piensa, aun cuando no tenga conciencia de ello.
La filosofía, segura de que la razón rige el mundo, estará convencida de que lo sucedido se somete al concepto y no trastocará la verdad, como es hoy de moda.
El drama no es elegir entre el bien y el mal, sino entre el bien y el bien.
El valor de los individuos descansa, pues, en que sean conformes al espíritu del pueblo, en que sean representantes de este espírutu del pueblo, en que sean representantes de este espíritu, pertenezcan a una clase, en los negocios del conjunto.
Lo que el hombre es realmente, tiene que serlo idealmente.
Los hombres no son sino los instrumentos del genio del universo.
La idea universal es, por tanto, plenitud sustancial por un lado y abstracción del libre albedrío por otro.
Tened el valor de equivocaros.
Si afirmamos que Dios es desconocido, no somos ya cristianos.
Lo bello es esencialmente lo espiritual, que se exterioriza materialmente y se presenta en el ser material.
El hombre que no es capaz de luchar por la libertad, no es un hombre, es un siervo.
El punto de la finitud consiste en la actividad individual que da existencia a lo universal, realizando sus determinaciones.
Lo que se tiene en el sentimiento es completamente subjetivo, y sólo existe de un modo subjetivo. El que dice: yo siento así, se ha encerrado en sí mismo.
Lo que generalmente se llama realidad es considerado por la filosofía como cosa corrupta, que puede aparecer como real, pero que no es real en sí y por sí.
Explicar la historia es tanto como descubrir las pasiones de los hombres, su genio, sus fuerzas operantes; y a esa seguridad de la providencia suele llamársela su plan.
Todo lo racional es real; y todo lo real es racional.
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