Imágenes
Todos dejamos para más adelante, y todos nos arrepentimos de nuestras dilaciones.
Georg Christoph Lichtenberg
Concede a tu espíritu el hábito de la duda, y a tu corazón, el de la tolerancia.
El pueblo anhela oro y distinciones, y se sentiría timado si los tuviera. Entre los grandes también se ha puesto de moda envidiar al campesino su agua de manantial y su jergón de paja, y más de uno se sentiría asimismo timado si llegara a verse en ese estado. El poeta alude a un ideal, se dirá. Pero quién sabe si el campesino no idealiza a su vez el estado del gran señor.
Los médicos no deberían decir a ése le curé yo, sino ése no se me ha muerto.
Nada nos hace envejecer con más rapidez que el pensar incesantemente en que nos hacemos viejos.
Si la razón, hija del cielo, pudiera opinar de belleza, la única fealdad sería la enfermedad. F-759
El sabio busca la sabiduría; el tonto la ha encontrado.
Los hombres más fastidiosos del mundo son los que tienen más energía que capacidades.
Para la mayoría de la gente, dudar de una cosa es simplemente creer ciegamente en otra.
El renombre y el reposo no compaginan.
Mi hipocondría, a decir verdad, es un talento especial que consiste en esto: saber extraer de cada incidente de la vida, sea cual sea el nombre que lleve, la mayor cantidad de veneno para mi propio uso.
Los grandes hombres también yerran, y algunos con tanta frecuencia que casi se caería en la tentación de considerarlos pequeños.
El francés es un hombre muy agradable cuando empieza a creer en Dios por segunda vez.
La enfermedad es la mayor imperfección del hombre.
Si en el mundo sólo hubiera patatas y zanahorias, no faltaría alguien que dijese: ¡lástima que las plantas crezcan al revés!
El grado más alto hasta donde puede elevarse un espíritu mediocre, pero provisto de experiencia, es el talento de descubrir las debilidades de los hombres que valen más que él.
Amarse a sí mismo al menos tiene una ventaja: no hay muchos rivales.
Los santos esculpidos han ejercido en el mundo mucha mayor influencia que los vivos.
Es casi imposible llevar la antorcha de la verdad a través de una multitud sin chamuscarle la barba a alguien.
A la gloria de los más famosos se adscribe siempre algo de la miopía de los admiradores.
El amor es un negocio en el que las dos partes salen ganando.
Se ahoga más gente en los vasos que en los ríos.
La moderación presupone el placer; la abstinencia, no. Por eso hay más abstemios que moderados. J-780
Resulta imposible atravesar una muchedumbre con la llama de la verdad sin quemarle a alguien la barba.
Un libro es una especie de espejo, cuando un mono se mira en él, no descubre la imagen de un apostol.
Todo el mundo admite que las historias obscenas que uno mismo escribe, distan de tener un efecto tan peligroso como las escritas por otros.
La tendencia humana a juzgar importantes las pequeñas cosas ha producido muchas cosas grandes.
Precisamente porque los hombres nacen con capacidades desiguales y el más fuerte se comería al más débil es que se han unido en sociedades y han instaurado mayor igualdad a través de las leyes. ¿Qué otra cosa es el denominado equilibrio de Europa? En general, sería mejor decir equilibrio de clases, en vez de igualdad.
Tres agudezas y una mentira hacen hoy en día a un escritor.
No nos hacemos mejores cuando ocultamos nuestros defectos; antes bien, nuestro valor moral aumenta con la sinceridad con que nos confesamos.
Hay un estado, que al menos en mi no es muy raro, en el que uno soporta igualmente mal la presencia o la ausencia de una persona amada; al menos en la presencia no encuentra el placer que, a juzgar por la intolerabilidad de la ausencia, debería esperar de ella.
Todos somos un genio al menos una vez al año. Los verdaderos genios simplemente tienen sus ideas brillantes próximas a ello.
La idea de que en el cielo hay una mayor igualdad de clases es lo que, en el fondo, lo hace tan agradable a los ojos de los pobres.
Me encantaría saber qué pasaría si un día llegase del cielo la noticia de que el buen Dios se dispone a enviar una comisión de ángeles con plenos poderes para viajar por Europa, como los jueces en Inglaterra, y poner fin a los grandes procesos que, en el mundo, no tienen otro juez que el derecho del más fuerte.
El buen Dios ha de tenernos en verdad mucho cariño para acercarse siempre a nosotros con un tiempo tan malo.
El orden conduce a todas las virtudes, pero, ¿qué conduce al orden?
La verdadera historia no es la de las masas sino la de los hombres de genio.
El ser humano ama la compañía, así sea de una velita encendida.
Hay cien ingeniosos por uno que posee juicio, una frase muy cierta y que tranquilizará a más de un necio sin ingenio, que, no obstante, debería pensar -si no es mucho pedirle a un necio- que también hay cien personas carentes de ingenio y de juicio, por una que posee ingenio.
No te dejes contagiar, no des ninguna opinión como tuya antes de ver si se adecúa a ti, mejor opina tú mismo.