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Las palabras mienten. La música, la música sólo dice la verdad.
Gabriel Marcel
Pensadores contemporáneos dirían que el hombre se trasciende a sí mismo continuamente.
Amar a alguien es decirle: tú no morirás jamás.
Cuando uno no vive como piensa, acaba pensando como vive.
El elemento dinámico en mi filosofía, en su conjunto, puede considerarse como una obstinada e incansable lucha contra el espíritu de abstracción.
No hay más que un solo sufrimiento: la soledad.
Hay mucha más vida en la música de las matemáticas o la lógica.
Mientras sea creador, por bajo que sea el nivel de su creación, un hombre puede considerarse verdaderamente libre.
Frente al ser no cabe más que la opción, por lo que la Metafísica es la lógica de la libertad.
Los misterios no son problemas insolubles, sino realidades no objetivables, pero que al estar inmersos en ellas nos iluminan.
El hombre depende en gran medida de la idea que se hace de sí mismo.
La esperanza es para el alma lo que la respiración es para el ser vivo. Cuando falta la esperanza, el alma se anquilosa y extenúa.
La vida es una lucha contra la nada.
Debemos vivir y trabajar, en cada momento, como si tuviésemos la eternidad ante nosotros.
Para ser feliz en el amor uno debe saber, sin cegarse, cómo cerrar los ojos.