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¡Si uno se mirase desde afuera sin piedad, sin llorar, sin bondad, sin jamás dejarse engañar!
Fito Páez
Afuera los pibes en la ciudad, creo que no sueñan, no sueñan más. No quiero dólares nena, vuelvo a casa a soñar con vos. Y en casa grito: me hundo, me hundo, me hundo.
Labios de amor, sombras de amor, entre las piedras un rayo de amor cáliz de amor, cruces de amor, clave de muerte, clave de sol.
Sos tan hermosa que jamás vas a dejar de brillar así, aquí o allá.
Vino todo el mundo, la radio y la TV, vino el comisario, los ángeles también. Todos quieren algo, sangre o no sé qué y todo el universo sigue intacto como ayer... Dame tu amor, sólo tu amor.
Un acercamiento, una señal, un paso al frente, no existen palabras si uno manda lo que siente.
Todos los momentos en los que te hice feliz son los restos de nuestro amor.
Un hombre se hace fuerte cuando se decepciona.
Qué bien te veo crecer, con tu encanto de Rey Sol me dejas la miel de tu risa bebé, yo vuelvo a ser miel con tu voz...
¿Quién dijo que todo está perdido? Yo vengo a ofrecer mi corazón...
Las cosas siempre suceden, las más hermosas son sin querer... Qué suerte que hoy la alegría tiene tu nombre y tu piel.
Si es amor, cruzará huracanes y tormentas.
Algunas cosas en mi vida sé que no van a cambiar. A cara o ceca querida, yo siempre te voy a amar.
Y si es amor, lo que nunca compartimos, las vidas que no vivimos juntos, las miradas que esquivamos, las mentiras que dañaron, nada nos importará si es amor.
Más horas al piano y menos a la charlatanería.
Y dale alegría, alegría a mi corazón y que se enciendan las luces de este amor. Y ya verás cómo se transforma el aire del lugar. Y ya verás que no necesitaremos nada más.
Creo que aun tal vez piensas en mi, creo poder captarlo.
Pero hay una ley que yo aprendí en la calle, de este laberinto alguien siempre sale.
No, es que yo no quiero más nadar en piletas. Quiero vivir aquí, más quiero cambiar, cambiar para sentirme vivo y te daré una flor antes que un decadrón... ¡Oh! Mi amor, estoy tranquilo pero herido.
Las palabras nos explican lo que nunca entenderemos: si fue cierto, fue mentira, o si al fin fue todo un sueño.
¡Ah! Tu corazón, desnudo mar abierto, no sopla el viento, todo resulto un juego, que quita el miedo.
Si es amor, comeremos en la misma mesa.
Y esto se sabe, buena suerte compañero, nadie sale vivo al ruedo, es una cuestión de fe.
Hablo de países y de esperanza, hablo por la vida, hablo por la nada, hablo por cambiar esta, nuestra casa, de cambiarla por cambiar nomás.
Porque aquí y en todas partes hay... Pibes en el balcón, también hay pibes en un cajón, y hay mucha rabia suelta y angustia nena y hay mucha, mucha desesperación.
La lluvia es un espejo que me ayuda a verte bien.
Nadie detiene al amor en un lugar.
Y ahora que busqué, y ahora que encontré el perfume que lleva al dolor, en la esencia de las almas, en la ausencia del dolor, ahora sé que ya no puedo vivir sin tu amor.
Pasó, pasó, pasó nuestro cuarto de hora. Pasó, pasó, pero aún sabíamos reír.
No cuento el vuelto, siempre es de más.
Hoy los tiempos van a mil y tu extraño corazón ya no capta como antes las pulsiones del amor. Yo te digo que dar es dar, dar y amar.
Sabe amargo el licor de las cosas queridas.
Niña bonita, mi amor, ¿qué es esa cabeza gacha?
La falsa utopía de un mundo perfecto se hundió hace unos días en un baño infecto.
El tiempo es un efecto fugaz y hay, hay cosas que no voy a olvidar... La noche que dejaste de actuar sólo para darme amor.
Lo importante no es llegar, lo importante es el camino; yo no busco la verdad, sólo sé que hay un destino.
Porque no prueban una noche, cuando lleguen a su casa, no haya nadie y el teléfono no suena ¿A ver qué pasa?
Y después solo quiero, solamente quiero verte sola y apagar la luz.
No sé por qué pero jamás los volví a ver, él carga con 11 y ella con 6 y si reía, él le daba la luna... Miren todos, ellos solos pueden más que el amor y son más fuertes que el Olimpo.
Todo poco a poco va dejando de importar, todo menos esos paraísos en el mar y navegar y navegar y navegar.