Imágenes
Tener un hijo no es tener un ramo de rosas.
Federico García Lorca
Después de mi casamiento he pensado noche y día de quién era la culpa, y cada vez que pienso sale una nueva culpa que se come a la otra, pero ¡siempre hay culpa!
Siempre has sido lista. Has visto lo malo de las gentes a cien leguas... Pero los hijos son los hijos. Ahora estás ciega.
¡No me mires más! Si quieres te daré mis ojos, que son frescos, y mis espaldas para que te compongas la joroba que tienes.
La traducción destroza el espíritu del lenguaje.
Verde que te quiero verde. Verde viento. Verdes ramas. El barco sobre la mar y el caballo en la montaña.
Hay cosas encerradas dentro de los muros que, si salieran de pronto a la calle y gritaran, llenarían el mundo.
El que quiere arañar la luna, se arañará el corazón.
Un reposo claro y allí nuestros besos, lunares sonoros del eco, se abrirían muy lejos. Y tu corazón caliente, nada más.
Nada turba los siglos pasados. No podemos arrancar un suspiro de lo viejo.
¡Es tan triste la vida en el cementerio! ¡Rana, empieza tu cantar!
La nieve del alma tiene copos de besos y escenas que se hundieron en la sombra o en la luz del que las piensa.
La poesía no quiere adeptos, quiere amantes.
La agonía física, biológica, natural, de un cuerpo por hambre, sed o frío, dura poco, muy poco, pero la agonía del alma insatisfecha dura toda la vida.
Dejaría en este libro toda mi alma.
Porque tú crees que el tiempo cura y que las paredes tapan, y no es verdad, no es verdad.
Esperando, el nudo se deshace y la fruta madura.
El primer beso que supo a beso y fue para mis labios niños como la lluvia fresca.
En la bandera de la libertad bordé el amor más grande de mi vida.
Callar y quemarse es el castigo más grande que nos podemos echar encima.
El teatro es poesía que se sale del libro para hacerse humana.
Quiero llorar porque me da la gana.
Nuestro ideal no llega a las estrellas, es sereno, sencillo; quisiéramos hacer miel como abejas, o tener dulce voz o fuerte grito, o fácil caminar sobre las hierbas o senos donde mamen nuestros hijos.
Los toros son la fiesta más culta que hay hoy en el mundo.
La creación poética es un misterio indescifrable, como el misterio del nacimiento del hombre. Se oyen voces, no se sabe de dónde, y es inútil preocuparse de dónde vienen.
Andalucía es increíble. Oriente sin veneno. Occidente sin acción.
Mira a la derecha y a la izquierda del tiempo y que tu corazón aprenda a estar tranquilo.
No soy un hombre, ni un poeta, ni una hoja, sino un pulso herido que presiente el más alla.
La soledad es la gran talladora del espíritu.
Poesía es la unión de dos palabras que uno nunca supuso que pudieran juntarse, y que forman algo así como un misterio.
Cuando sale la luna se pierden las campanas y aparecen las sendas impenetrables Cuando sale la luna, el mar cubre la tierra y el corazón se siente isla en el infinito.
No me gusta andar de noche. La noche se hizo para dormir.
No es sueño la vida. ¡Alerta! ¡Alerta! ¡Alerta!
Hay dulzura infantil en la mañana quieta.
El silencio. Es un silencio ondulado, un silencio, donde resbalan valles y ecos y que inclina las frentes hacia el suelo.
¿Si la esperanza se apaga y la Babel se comienza qué antorcha iluminará los caminos en la Tierra?
Pero el dos no ha sido nunca un número porque es una angustia y su sombra.
La lluvia tiene un vago secreto de ternura, algo de somnolencia resignada y amable, una música humilde se despierta con ella que hace vibrar el alma dormida del paisaje.
Como no me he preocupado de nacer, no me preocupo de morir.
El toreo es la riqueza poética y vital mayor de España.