Imágenes
Sólo el hombre que nada espera es verdaderamente libre.
Edward Young
De noche hasta un ateo llega casi a creer en Dios.
La dilación es el ladrón del tiempo.
¡Te parece extraño que hayas de vivir para siempre! Y ¿no te parece más extraño el hecho de vivirahora? Esto es un milagro, no aquello.
¡Oh, cuán perdido está para la virtud, para el pensamiento viril, para los nobles impulsos del alma, aquel que se cree que soledad es estar solo!
Hombres indoctos asumen el cuidado de los libros, del mismo modo que los eunucos custodian a las mujeres hermosas.
El hombre que consagra sus horas con incansable empeño y honradas miras, arranca su aguijón a la vida y a la muerte.
¡Cuán pobre y cuán rico, cuán abyecto y cuán augusto, cuán complicado y cuán maravilloso es el hombre! ¡Y cuán sobre toda ponderación Aquel que lo hizo así!
La vida es el desierto, la vida es la soledad; la muerte nos reúne con la mayoría.
En un hombre bueno, el estar triste es impiedad.
La religión es una cadena de oro que une la tierra con el cielo.
El hombre que se ruboriza no es completamente una bestia.
Hombres indoctos cuidan de los libros, a la manera que los eunucos guardan bellas mujeres.
La fortuna de los ricos, la gloria de los héroes, la majestad de los todo acaba en un aquí yace.
Este mundo es una profecía de futuros mundos.