Imágenes
Ha visto que el reino de este mundo está lleno de poder, belleza, guerra, una radiante corteza que se levanta rodeando fuegos centrales, entretejidos con los cielos que han descendido. Los hombres, declarando que los inspira, actúan llenos de gozo en la superficie terrestre, teniendo los más agradables torneos con otros hombres, felices, no porque son varoniles sino porque están vivos.
Edward Morgan Forster
Pero de verdad te amo, seguramente de una manera mejor que la suya -y se quedó pensativo-. Sí, realmente de una manera mejor.
Solamente advirtió que la vela ardería mejor y hacer el equipaje sería más fácil y el mundo más feliz, si pudiese dar y recibir algo de amor humano.
La vida nunca nos depara lo que queremos en el momento apropiado. Las aventuras ocurren, pero no puntualmente.
Pero una persona no habla con plena sinceridad consigo mismo (ni siquiera consigo mismo); la felicidad o el sufrimiento que secretamente siente proceden de causas que no puede explicar del todo, pues tan pronto como las eleva al plano de lo explicable pierden su cualidad original.
No es posible amar e irse. Deseará que así sea. Puede transmutar el amor, ignorarlo, confundirlo, pero nunca podrá apartarlo completamente de sí misma. Sé por experiencia que los poetas tienen razón: el amor es eterno.
Si bien las personas son importantes, no sucede lo mismo con sus relaciones, y que, de manera más concreta, se hacían demasiadas alharacas en relación con el matrimonio; a pesar de siglos de abrazos carnales, el hombre no estaba más cerca que antes de entender a sus semejantes.
Disculpe mis errores, dese cuenta de mis limitaciones. La vida no es fácil tal como la conocemos en la tierra.
Vamos, la India no está tan mal como todo eso -dijo una voz agradable-. El otro lado del mundo, si usted quiere, pero la luna sigue siendo la misma.
Las aventuras llegan, pero no puntualmente.
La belleza debe parecerlo; es la emoción que mejor le sienta a su semblante. Botticelli lo sabía cuando la pintó surgiendo de las olas entre los vientos y las flores. La belleza, que no parece sorprendida, que acepta su condición como algo que se le debe, nos recuerda demasiado a una prima donna.
La prueba final de una novela será el cariño que nos inspire; la misma prueba que hacemos a nuestros amigos y a todas esas otras cosas que no podemos definir.
Todo el mundo nace, pero nadie recuerda cómo. La muerte sobreviene como el nacimiento, pero tampoco sabemos de qué modo. Nuestra experiencia última, al igual que la primera, es conjetural. Nos movemos entre dos oscuridades.
Los muy pobres son algo impensable y sólo nos podemos acercar con el estadístico y el poeta.
Los libros largos, cuando se leen, son normalmente sobrevalorados, porque el lector quiere convencer a los demás y a sí mismo de que no ha perdido el tiempo.
La vida nunca nos da lo que queremos en el momento que consideramos adecuado.
La muerte destruye al hombre: la idea de la muerte lo salva.
No me pueden echar de mi trabajo, porque mi trabajo es la educación. Creo en enseñar a la gente a ser individuos singulares y a entender a otras personas, también distintas.
¡No, no, señorita Lucy! Espero que prescinda pronto de su Baedeker. Sólo enseña los lugares superficialmente. Por lo que se refiere a la verdadera Italia, no la ha visto ni en sueños. La verdadera Italia se descubre solamente con paciente observación.
La armadura de falsedad se desenvuelve sutilmente en la oscuridad y encubre a un hombre no sólo al resto de los hombres sino también a su propia alma.
La vida -escribió un amigo mío- es un recital público de violín en el cual uno va aprendiendo a tocar el instrumento mientras va interpretando.
Desconfía de todas las empresas que requieren vestidos nuevos.
Uno no viene a Italia para encontrarse con cosas agradables -fue la réplica-; uno viene a encontrar vida. Buon giorno! Buon giorno!
La música que nunca vence, que nunca mengua, sino que ondea hacia la eternidad como los mares límpidos del país de las hadas.
Es un error creer que siempre van a existir los libros. La raza humana no los ha necesitado durante millares de años; puede decidir hacer otra vez lo mismo.
Esa es la razón de que la India esté en una situación tan crítica: que siempre lo dejamos todo para más adelante.
Retengamos la idea de lucha: toda acción es una batalla; la única felicidad es la paz.
Descendiendo del cielo a la tierra, donde siempre hay sombras porque hay colinas.