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El camino de la verdad es ancho y fácil de hallar. El único inconveniente estriba en que los hombres no lo buscan.
Confucio
Oír o leer sin reflexionar es una ocupación inútil.
Pensar dos veces ya es bastante.
Aquél que procura asegurar el bienestar ajeno, ya tiene asegurado el propio.
Gobernar significa rectificar.
Cosa del cielo es poseer la verdad, cosa del hombre es buscar la verdad. Quien posee lo verdadero acierta lo justo sin esfuerzo, logra el éxito sin reflexionar.
Lo máximo que un hombre conoce, es lo máximo que perdona.
¿Me preguntas por qué compro arroz y flores? Compro arroz para vivir y flores para tener algo por lo que vivir.
Palabras de amable reconvención no pueden menos de agradar al que escucha. Pero la meditación sobre ellas es lo que verdaderamente importa.
El buen líder sabe lo que es verdad; el mal líder sabe lo que se vende mejor.
Que se nos haga un agravio no significa nada, a menos que insistamos en recordarlo.
El buen procedimiento consiste en ser en todo sincero y conformar el alma con voluntad universal, esto es, hacer con los demás lo que yo deseo que ellos hagan conmigo.
Aprender sin pensar es tiempo perdido; pensar sin aprender es peligroso.
No debes quejarte de la nieve en el tejado de tu vecino cuando también cubre el umbral de tu casa.
El hombre superior es cortés, pero no rastrero; el hombre vulgar es rastrero, pero no cortés.
Ni quiero ni rechazo nada de modo absoluto, sino que consulto siempre las circunstancias.
Escuchar muchas cosas y seleccionar de entre ellas lo bueno y seguirlo; ver muchas cosas y grabárselas en la mente; he aquí, al menos, el segundo grado de sabiduría.
Nada es más digna de admiración en un hombre noble que el saber aceptar e imitar las virtudes de los demás.
El leer sin pensar nos hace una mente desordenada. El pensar sin leer nos hace desequilibrados.
Es posible conseguir algo luego de tres horas de pelea, pero es seguro que se podrá conseguir con apenas tres palabras impregnadas de afecto.
Dificilmente yerra un hombre por exceso de moderación.
El sendero recto no es seguido. Yo conozco la causa de ello. Los hombres instruidos lo rebasan; los ignorantes no lo alcanzan. Los hombres de virtud fuerte llegan más allá; los de virtud débil no llegan. El hombre de virtud auténtica persevera naturalmente en la práctica del medio igualmente alejado de los extremos.
En general los hombres aman más la belleza corporal que la virtud.
La verdadera ciencia consiste en conocer que se sabe lo que realmente se sabe, y que se ignora lo que en verdad se ignora. En esto consiste la verdadera sabiduría.
Quien pretenda una felicidad y sabiduría constantes, deberá acomodarse a frecuentes cambios.
El hombre superior es modesto en el hablar, pero abundante en el obrar.
El sabio teme la bonanza; empero cuando descarga la tempestad camina sobre las olas y desafía los vientos.
Cuando se emprenden guerras para conquistar nuevos territorios, los campos quedarán cubiertos por los cuerpos de las víctimas.
Señal es de hombre superior el no aceptar una ociosidad perniciosa.
Un caballero es tolerante y libre, un hombre común está lleno de ansiedad y temor.
El arquero es un modelo para el sabio. Cuando le ha fallado al blanco, busca la causa en sí mismo.
La regla de conductamoral del hombre es la ley de todas las inteligencias, que ilumina el Universo, así en lo más alto de los cielos como en lo más profundo de los abismos.
La venganza eterniza los odios.
No es verdadera norma de conducta la que se descubre fuera del hombre, es decir, la que no deriva directamente de la propia naturaleza humana.
El lenguaje artificioso y la conducta aduladora rara vez acompañan a la virtud.
Bondad en el padre, piedad filial en el hijo; gentileza en el hermano mayor, humildad y respeto en el menor; comportamiento justo en el esposo, obediencia en la esposa; consideración humana en los mayores, respeto en los menores; benevolencia en los gobernantes, lealtad en los ministros y los súbditos.
Si no se respeta lo sagrado, no se tiene nada en que fijar la conducta.
Sabemos tan poco acerca de la vida. ¿Cómo podremos saber algo acerca de la muerte?
¿Hay un precepto que pueda guiar la acción de toda una vida? Amar.
El que exige mucho de sí mismo y poco de los demás, estará libre de odio.