Imágenes
Quien aprende, no por ello penetra hasta la verdad; quien penetra hasta la verdad, no por ello es capaz de afianzarla; quien la afianza, no por ello está en condiciones de sopesarla en cada circunstancia particular.
Confucio
Cuando el objetivo te parezca difícil, no cambies de objetivo; busca un nuevo camino para llegar a él.
Si se mata una gallina, ¿Para qué utilizar un cuchillo, que sirve para matar bueyes?
Para que pueda trabarse una verdadera amistad, es preciso prescindir de la superioridad que puedan otorgar la edad, los honores, las riquezas o el poder. El único motivo que nos debe incitar a la amistad es la búsqueda de las virtudes y el mutuo perfeccionamiento.
Resulta totalmente imposible gobernar un pueblo si éste ha perdido la confianza en sus gobernantes.
El cielo gobierna los acontecimientos del mundo sin ser visto; esta acción oculta del cielo es lo que se llama el destino.
Ver una injusticia y no hacer nada es no tener valor.
Por naturaleza, los hombres son muy parecidos entre sí. Son el saber y la experiencia lo que los diferencia.
El hombre superior es persistente en el camino cierto y no sólo persistente.
Desde el hombre más elevado en dignidad, hasta el más humilde y más oscuro, deber igual para todos es: corregir y mejorar su persona: el perfeccionamiento de sí mismo es la base fundamental de todo progreso y de todo desenvolvimiento moral.
Oigo y olvido. Veo y aprendo. Hago y entiendo.
Por muy lejos que el espíritu vaya, nunca irá más lejos que el corazón.
Perfeccionarse a sí mismo es, sin duda, una virtud; perfeccionar a los demás seres es una ciencia elevada.
¿En qué consiste la bondad? En amar a todos los hombres.
El hombre superior entiende lo justo. El hombre inferior entiende lo que ha de vender.
Debes tener siempre fría la cabeza, caliente el corazón y tendida la mano.
Recompensa la injuria con justicia, y la bondad con bondad.
Si el hombre no tiene costumbre de preguntar, yo no puedo hacer nada por él.
Cuando veas a un hombre bueno, trata de imitarlo; cuando veas a un hombre malo, examínate a ti mismo.
Cuando el corazón se agita, se ofrenda rutinariamente. Por eso, sólo el sabio es capaz de agotar el sentido de la ofrenda.
La música produce una especie de placer sin el que la naturaleza humana no puede pasar.
Yo no imparto enseñanza al que no se esfuerza sinceramente en aprender.
Tuve por maestro a la desgracia y me ha servido de mucho.
La virtud no habita en la soledad: debe tener vecinos.
El caballero se culpa a sí mismo, mientras que el hombre ordinario culpa a los demás.
Cuando veas el bien, procede como si nunca pudieras alcanzarlo completamente; cuando te veas frente a frente con el mal, procede como si fueras a probar el calor del agua hirviendo.
Aquel que sabe cuánto basta, siempre tiene bastante.
Hay tres caminos que llevan a la sabiduría: La imitación, el más sencillo; la reflexión, el más noble; y la experiencia, el más amargo.
El hombre que al llegar a los cuarenta no se ha dado a conocer no es digno de que se le mire con respeto.
El noble no se desentiende de sus semejantes.
Las acciones humanas tienen un principio y unas consecuencias: conocer las causas y los efectos, los principios y las consecuencias es aproximarse lo más cerca posible al método racional, con el cual se llega a la perfección.
El hombre que no medita y obra con precipitación, no podrá evitar grandes fracasos.
El amor eterno dura 2 o 3 meses.
La verdad no puede apartarse de la naturaleza humana. Si lo que consideramos verdad se aparta de la naturaleza humana, entonces no puede ser verdad.
Paga la injuria con la justicia, y la amabilidad con la amabilidad.
Cuando las familias individuales han aprendido la bondad, entonces la nación entera ha aprendido la cortesía.
En un país bien gobernado, la pobreza es algo que avergüenza. En un país mal gobernado, la riqueza es algo que avergüenza.
Si el hombre sabio observa una conducta displicente, no inspirará respeto; si se limita a estudiar, sus conocimientos no serán profundos. Debéis ser siempre sinceros, fieles y actuar con buena fe.
Mucho sabe el que conoce su propia ignorancia.
Sólo puede ser feliz siempre el que sepa ser feliz con todo.