Imágenes
El hombre se casa para retirarse del mundo; la mujer, para entrar en él.
Auguste-Louis Petiet
La popularidad es como la juventud: una vez ida, no vuelve.
Un hombre sin carácter es una nodriza sin leche, un soldado sin armas, un viajero sin dinero.
El hombre es verdaderamente libre cuando no teme y no desea nada.
Los hombres apetecen todo lo que no tienen; las mujeres sólo ambicionan lo que otras mujeres poseen.
Uno de los mayores males de la vejez es no tener confianza en sí mismo.
A los hombres hay que tomarlos como son, y a las mujeres, como quieren ellas ser.
El espíritu servil es un camino a la Fortuna.