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La virtud es el justo medio entre dos defectos.
Aristóteles
Bueno es aquello cuyo contrario es malo.
Ni tampoco por ser eterno será más bien, si no es más blanco lo que dura mucho tiempo que lo que dura un solo día.
La esperanza es el sueño del hombre despierto.
Además, ¿qué es lo que mueve a lo infinito? En efecto, si se mueve a sí mismo, estará animado. Pero ¿cómo es posible esto, a saber, que exista un ser vivo infinito? Y si es otro el que lo mueve, habrá dos infinitos, el motor y el movido, diferentes en forma y en potencia.
La grandeza no consiste en recibir honores, sino en merecerlos.
Esta es una especulación sobre la sustancia, en que buscamos los principios y las causas de las substancias.
Hacer mal por voluntad es peor que hacerlo por la fuerza.
La noción de las causas son la clave ideal para organizar el conocimiento.
El objeto de la guerra es la paz.
Si las acciones humanas pueden ser nobles, vergonzosas o indiferentes, lo mismo ocurre con los placeres correspondientes. Hay placeres que derivan de actividades nobles, y otros de vergonzoso origen.
Y, lógicamente, se mueve con movimiento incesante: pues todas las cosas cesan de moverse cuando llegan a su lugar propio, mientras que el lugar de donde parte el cuerpo circular es el mismo adonde va a parar.
La riqueza consiste mucho más en el disfrute que en la posesión.
Todo lo que hacemos está puesto con el ojo en otra cosa.
Porque en toda acción en la que se da lo más y lo menos se da también lo igual.
Lo que con mucho trabajo se adquiere, más se ama.
El alma es la causa eficiente y el principio organizador del cuerpo viviente.
Es mejor que, la soberanía, descanse en la ley.
El sabio persigue la ausencia de dolor, no el placer.
Parece, en efecto, que el principio es más de la mitad del todo, y que por él se aclaran muchas de las cosas que se buscan.
Un error mínimo al principio puede ser máximo al final.
La envidia es una pena que causa turbación y que se refiere a la prosperidad, mas no a la del que es indigno de ella, sino a la de un igual o semejante.
La salud es la justa medida entre el calor y el frío.
Así pues, queda de manifiesto que es imposible que este mundo sea eterno y, a la vez, se haya generado.
Las ciencias tienen las raíces amargas, pero muy dulces los frutos.
Nada hay en la mente que no haya estado antes en los sentidos.
La felicidad es para aquellos que se bastan a sí mismos.
Los tiranos se rodean de hombres malos porque les gusta ser adulados y ningún hombre de espíritu elevado les adulará.
La verdadera felicidad proviene de la posesión de sabiduría y virtud, y no de la posesión de bienes externos.
Cuando se trata de juzgar el placer, los hombres somos jueces imparciales.
La virtud es una disposisción voluntaria adquirida, que consiste en un término medio entre dos extremos malos, el uno por exceso y el otro por defecto.
... el primer cuerpo es uno distinto de la tierra, el fuego, el aire y el agua, llamaron éter al lugar más excelso, dándole esa denominación a partir del hecho de desplazarse siempre por tiempo interminable.
Todos los hombres tienen naturalmente el deseo de saber. El placer que nos causan las percepciones de nuestros sentidos son una prueba de esta verdad.
El egoísmo no es el amor propio, sino una pasión desordenada por uno mismo.
¿Qué es un amigo? Una misma alma que habita en dos cuerpos.
Enojarse es fácil, pero enojarse en la magnitud adecuada, con la persona adecuada, en el momento adecuado eso es cosa de sabios.
En todo el tiempo transcurrido, de acuerdo con los recuerdos transmitidos de unos hombres a otros, nada parece haber cambiado,... Enseñar es la forma más pura de entender.
La ironía es una forma de menosprecio.
Los avaros atesoran como si hubieran de vivir eternamente, y los pródigos disipan lo mismo que si fuesen a morirse.
Pero es evidente que, si los cuerpos simples son limitados, necesariamente será limitado el compuesto de ellos;...