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La mujer finge más que miente; el hombre miente más que finge.
Anónimo
Los necios inscriben sus nombres en todas partes.
Lo único bueno de equivocarse es la alegría que produce a los demás.
A quien de bueno viene, por bueno se le tiene.
Enuncia tu verdad de manera clara y serena y escucha a los demás, incluso al que crees torpe e ignorante ya que también ellos tienen su historia.
La vida es un gran libro que encierra dura y complicada enseñanza y que, generalmente, se termina de leer sin haberlo comprendido.
Confesamos los defectos pequeños para persuadir a los demás que no los tenemos grandes.
Es un placer hacer negocios contigo!!! nos hallamos con sangre.. digo.. TINTA!!
Con la vida debemos hacer lo que haríamos con una mujer coqueta y veleidosa: no amarla demasiado para no sufrir desengaños.
No todos repiten los chismes que oyen. Algunos los mejoran.
Al marido, sírvele como a señor, y guárdate de él como de un traidor.
Nos hemos tomado en serio aquello con lo cual sólo nos estaba permitido bromear (y viceversa).
Lo primero que se aprende al comprar una casa nueva es que no se vive en ella. Allí duerme uno, pero vive en la ferretería.
Que no se puede domar.
La magia es tan real como la realidad mágica.
La paciencia de los pueblos tiene su límite en la degradación.
La seguridad no es que las situaciones te afirmen que estás seguro si no que tu afirmes a las situaciones cuan seguro estás.
El amor se parece a las vacaciones, las esperas con ansias, las vives con contradicciones y las recuerdas con melancolía.
El médico, cura; la naturaleza, sana.
La Antigüedad tiene rango de ley.
¿Para qué te sirven el amor, la fortuna, la instrucción y la riqueza, si no te concedes el tiempo de gozarlos a tu gusto?
Una sonrisa no cuesta nada, pero crea mucho. Enriquece a quien la recibe, sin empobrecer a quien la da.
Dijo un sabio a una campesina: ¿Qué darías por saber lo que yo sé? Respondiendo esta: Daría más por saber lo que no sabes.
He tenido la suerte de tener la cercanía de muchos y la amistad de muy pocos.
Lo que la mujer quiere, Dios lo, quiere.
El aire natal es una medicina universal.
Que yo me casé con tres!
Parte principalísima de toda cosa es el principio.
Si afirmas que tu vida carece de sentido porque un día deberás morir. ¿Cuál sería su sentido si hoy te dijeran que nunca morirás?... Mira que la cosa no cambia por el solo hecho de durar.
La esperanza de que mañana seremos más ricos ¿compensa la impotencia de ser hoy más pobres?
No tienes que prometerme la luna... Me bastaría si sólo te sentarías conmigo un rato debajo de ella.
Escribir para comer no es comer ni es escribir.
Lo peor de la ignorancia -es que- a medida que se prolonga, adquiere confianza.
El camino no es largo cuando amas a quien vas a visitar.
No es la carga la que nos vence, sino la forma como la acarreamos.
¡Maximo!¡Máximo!
Se ha sembrado la palabra mañana, pero no ha brotado todavía.
Los errores que hay que evitar son aquellos que eliminan la posibilidad de volverlo a intentar.
De una pesadumbre no hagas dos.
A veces es necesario guardar silencio para ser escuchado.