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No permitas que tu felicidad dependa de alguien porque no siempre esa persona será como crees.
Albert Einstein
El dinero no lleva más que al egoísmo, y conduce irremediablemente al abuso.
La fuerza siempre atrae a hombres de baja moralidad, y creo que es una ley invariable que los que tiranizan el genio son sucedidos por sinvergüenzas.
No lo sé, procuro no cargar mi memoria con datos que puedo encontrar en cualquier manual, ya que el gran valor de la educación no consiste en atiborrarse de datos, sino en preparar al cerebro a pensar por su propia cuenta y así llegar a conocer algo que no figure en los libros.
El demonio ha puesto un castigo sobre todas las cosas de la vida con las que disfrutamos. O son malas para la salud, o son malas para el alma, o nos engordan.
Lo más difícil de comprender en el mundo es el impuesto sobre la renta.
El método axiomático puede servir muy poco para la teoría de la relatividad.
El socialismo está guiado hacia un fin ético-social. La ciencia, sin embargo, no puede establecer fines e, incluso menos, inculcarlos en los seres humanos; la ciencia puede proveer los medios con los que lograr ciertos fines.
No pienso nunca en el futuro porque llega muy pronto.
La formulación de un problema, es más importante que su solución.
Quien nunca ha cometido un error nunca ha probado algo nuevo.
Si quieres ser un gran científico, dedícate un cuarto de hora al día a pensar todo lo contrario a lo que piensan tus amigos.
La perfección de los medios y la confusión de los fines parecen caracterizar a nuestra época.
Si supiese qué es lo que estoy haciendo, no lo llamaría investigación, ¿verdad?
Si no chocamos contra la razón nunca llegaremos a nada.
Dios es sofisticado, pero no malévolo.
En tiempos de crisis la imaginación es más efectiva que el intelecto.
La ley de la gravedad no es responsable de que la gente caiga enamorada.
El secreto de la creatividad es saber como ocultar las fuentes.
Un hombre feliz está demasiado satisfecho con el presente como para obsesionarse demasiado con el futuro.
Los problemas significativos que enfrentamos no pueden resolverse en el mismo nivel de pensamiento que teníamos cuando los creamos.
Eso no es una comedia. Es una tragedia.
La suerte de la humanidad es, generalmente, la que ella se merece.
En el imperio de la verdad no cabe ninguna autoridad humana. El que allí intente hacer valer su autoridad, se estrellará contra las carcajadas de los dioses.
El valor de un hombre para su comunidad suele fijarse según cómo oriente su sensibilidad, su pensamiento y su acción hacia el reclamo de los otros.
La moda mística de estos tiempos, que se muestra particularmente en el crecimiento rampante de la llamada teosofía y espiritualismo, para mi no es más que un síntoma de debilidad y confusión. Como nuestras experiencias consisten en reproducciones y combinaciones de impresiones sensoriales, el concepto de un alma sin cuerpo me parece carente de cualquier tipo de significado.
Si mi teoría de la relatividad es exacta, los alemanes dirán que soy alemán y los franceses que soy ciudadano del mundo. Pero si no, los franceses dirán que soy alemán, y los alemanes que soy judío.
Nada de lo verdaderamente valioso surge de la ambición o de un mero sentido del deber.
Nunca le he atribuido a la naturaleza un propósito ni una meta, ni nada que pueda entenderse como antropomórfico.
Cuando las leyes de la matemáticas se refieren a la realidad, no son ciertas; cuando son ciertas, no se refieren a la realidad.
Si hay algo en mí que pueda ser llamado religioso es la ilimitada admiración por la estructura del mundo, hasta donde nuestra ciencia puede revelarla. No creo en la inmortalidad del individuo, y considero que la ética es de interés exclusivamente humano, sin ninguna autoridad sobrehumana sobre él.
La paz no puede mantenerse por la fuerza. Solamente puede alcanzarse por medio del entendimiento.
Estoy firmemente convencido de que la mayoría de los pueblos del mundo prefieren vivir en paz y en seguridad. El deseo de paz de la humanidad sólo puede convertirse en realidad mediante la creación de un gobierno mundial.
¿Cómo explicar que las matemáticas, un producto de la mente humana, independiente de la experiencia, se adapte tan admirablemente bien a los objetos de la realidad?
Cada día sabemos más y entendemos menos.
Si A es el éxito en la vida, entonces A = X + Y + Z. Donde X es trabajo, Y es placer y Z es mantener la boca cerrada.
¿Por qué esta magnífica tecnología científica, que ahorra trabajo y nos hace la vida mas fácil, nos aporta tan poca felicidad? La repuesta es está, simplemente: porque aún no hemos aprendido a usarla con tino.
La naturaleza esconde su secreto porque es sublime, no por astucia.
Toda la ciencia no es más que un refinamiento del pensamiento cotidiano.
Lo más bello que podemos experimentar es el lado misterioso de la vida; es el sentimiento profundo que se encuentra en la cuna del arte y de la ciencia verdadera.
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